Lo voy a poner yo, porque también se le olvida.
Se cogen unos granos ya tostados.
Se muelen.
Se ponen en la cafetera y la cafetera en el fuego.
Cuando comienza a hervir y a oler a gloria, se vierte en una taza o vaso...y cuidado con
quemarse. (Se puede soplar un pelín con disimulo).
Lo siento compañera Pili, no lo mires como competencia, sino como colaboración.
Es que me sale el "cocinilla" que llevo dentro.
Así se apetece tomar un cafetito en cualquier momento.
ResponderEliminarBonita entrada y unos comentarios muy simpáticos y ocurrentes. Enhorabuena.
ResponderEliminarBonita entrada y unos comentarios muy simpáticos y ocurrentes. Enhorabuena.
ResponderEliminarSimpáticas vosotras, "Nuni" y "Flores y árboles".
ResponderEliminarQue os siente bien el "cafelito".
Besos.
Tu pones el cafetito y yo pongo los dulces...caseros, por supuesto.
ResponderEliminarMuy sabrosos que están tus dulces.